En esta ocasión, reemplazaremos nuestro habitual comentario introductorio al tema común de las nuevas publicaciones, por este breve pero liminar mensaje de K:…
…. ¿Por qué no cambian? ¿Qué se los impide? Si cada uno de nosotros se formulara esa pregunta, no verbalmente ni de manera puramente intelectual, como un entretenimiento, sino que se la formulara profundamente, con la mayor seriedad, ¿cuál sería la respuesta?
¿Cuál es la respuesta de ustedes a este problema de que los seres humanos han vivido así por milenios y milenios? ¿Por qué no han cambiado? ¿Por qué ustedes, que están escuchando ahora, no han cambiado? Ustedes saben cuáles son las consecuencias si no cambian. Serán nacionalistas, serán tribales, insulares, vivirán aislados y, por tanto, no se relacionarán globalmente. Seguirán peleando, peleando, peleando fabricando más y más armamentos para destruirse unos a otros.
¿Por qué usted, si es totalmente serio en esta materia, por qué no se formula esa pregunta? «¿Por qué yo, como ser humano que ha pasado por todo esto, por qué no he cambiado?» ¿Cuál sería su respuesta?
O usted no es muy serio y quiere vivir una vida muy, muy superficial y esa superficialidad lo satisface temporariamente o realmente no le importa. En tanto tenga placeres inmediatos, satisfacciones inmediatas, a usted realmente no le importa. No le importa que sus hijos sean asesinados. Usted no siente profundo amor ni afecto por ellos. Si lo tuviera, evitaría todas las guerras. Aparentemente ninguna de estas cosas significan nada para usted.
Muy probablemente ustedes están tan profundamente condicionados psicológicamente (naturalmente que estamos biológicamente condicionados, eso es completamente distinto), pero estamos psicológicamente condicionados y no somos conscientes de ello. A menos que haya libertad de ese condicionamiento, continuaremos de ese modo.
Después de todo, la vida es una, un solo movimiento unitario y global. Del mismo modo, nuestra conciencia es común a toda la humanidad. Ahora bien, si yo cambio de manera radical, es indudable que ello influye en el resto de la conciencia humana. ¿Por qué no cambia usted, entonces?
De la película «El reto del cambio» (documental sobre vida y obra de K.)