Introducir la cuestión de Dios en este espacio y en particular en relación a la enseñanza de K, es un desafío.
Han sido múltiples y diversas las interpretaciones y posturas respecto a su religiosidad (o no).
Se encuentra culturalmente establecido a lo largo del tiempo que hablar de Dios y la religiosidad es algo muy parecido.
¿Pero es necesariamente así, o existe otro modo de abordar la cuestión?, parece que si, veamos pues: